El Síndrome de Congestión Pélvica: Embolización de varices pélvicas

El Síndrome de Congestión Pélvica: Embolización de varices pélvicas

El Síndrome de Congestión Pélvica es una enfermedad que afecta en torno al 10% de las mujeres y cuya diagnosis es compleja. Habitualmente, está relacionado con la aparición de varices pélvicas que son dilataciones de las venas de drenaje a nivel de la pelvis, la parte más baja del abdomen, y que se suelen localizar alrededor del útero y las zonas colindantes al sistema reproductor..

Estas varices se desarrollan como consecuencia de un problema de insuficiencia venosa pélvica, bien sea por dilatación o por compresión de alguna de las venas de la zona, y que frecuentemente está en relación, directa o indirecta, con la insuficiencia venosa en los miembros inferiores. Suele afectar a mujeres en edad fértil con una edad inferior a los 45 años y es muy poco común en mujeres que no han estado embarazadas, aunque también puede aparecer con cierta frecuencia en mujeres con fenotipo altas y delgadas con poco índice de grasa corporal. Su adecuado diagnóstico se basa en la correcta búsqueda de datos clínicos por parte del angiólogo y en la realización de varias pruebas como ecografía, TAC y/o resonancia magnética que confirmaran el diagnóstico.

¿Cuáles son los síntomas?

Los síntomas que pueden advertirnos de que estamos antes un caso de Síndrome de Congestión Pélvica son:

Dolor en el abdomen de más de seis meses de duración, y que no guarda relación con otras casusas de origen digestivo o ginecológico. La dolencia se agrava cuando permanecemos de pie y durante el periodo. La intensidad del mismo puede ser variable, aunque en muchos casos puede resultar invalidante.

Pesadez constante en el bajo vientre que aumenta en los períodos de menstruación.

Sensación de orina irreal que pueden provocar infecciones.

Dolor pélvico durante el coito o sensación de molestias e inflamación interna después del mismo.

Aparición de varices en los alrededores de la vulva, en las nalgas o en la parte posterior del muslo.

¿Cómo es la embolización de varices pélvica?

En caso de padecer Síndrome de Congestión Pélvica, el tratamiento que mejores resultados está aportando hasta la fecha es la embolización de las venas disfuncionantes en la pelvis que povocan las varices, con una tasa de éxito superior al 95%. Esta técnica para la embolización pélvica fue introducida en el año 1993 y ayuda a eliminar los síntomas de dolores pélvicos y pesadez en el bajo vientre, ciclos menstruales muy largos y con dolor, molestias durante las relaciones sexuales, síntoma de piernas cansadas y varices en localizaciones atípicas.

El tratamiento consiste en una punción a nivel del brazo o de la ingle para acceder al sistema venoso. Mediante guías y catéteres se navega hasta los puntos clave de la pelvis y, una vez alcanzada la localización, se realizan unas radiografías con contraste para determinar qué venas están fallando y se ubican unos dispositivos llamados ‘Coils’ o espirales que actúan a modo de tapón interrumpiendo el flujo sanguíneo en las venas que aportan problemas.

En este sentido, los especialistas del Instituto Vascular y Endovascular Internacional (IVEI) son, probablemente, los de mayor experiencia en este campo de toda Andalucía, presentando tasas de éxito tanto técnico como en mejoría de la sintomatología por encima del 95%.